Es muy común en los regulares de SNG llegar a un punto clave de la mano sin saber muy bien que decisión tomar. Esto se debe a un error en la planificación de la mano, o más bien a una falta de planificación. Realizamos apuestas de continuación de forma automática sin parar a pensar en los stacks, SPRs, el rango del rival, la textura del flop y en el tamaño óptimo en función del objetivo que perseguimos y eso deriva en complicaciones varias en turn y river, donde no sabemos muy bien como actuar, con la consecuente quemada de dinero que eso implica.
Generalmente, el regular medio, llegado a este punto de indecisión opta por la via más conservadora escudándose en el: "tengo xBBs todavía, las ciegas están bajas; yo no me juego el torneo ahí. Foldeo y ya habrá spots mejores". Este es el error más común tanto en SNG como en MTT. Un jugador de cash no puede escudarse en esta afirmación para foldear de más, evidentemente, ya que carece completamente de sentido. Así que al no poder evitar tomar decisiones complejas y arriesgadas en turn y river no le queda otra que tratar de mejorar su juego en estas calles y dejar de optar por la linea más weak sin tener razones claras. Sin embargo el jugador de SNGs parece no tener demasiada preocupación en foldear de más, mientras se vea vivo en el torneo. Poco importa si has creado un bote monstruoso sin tener ni idea de por qué, mientras nos queden las suficientes ciegas por detrás como para sentirnos vivos en el torneo, el fold es una opción.
Pero, ¿hasta qué punto es tan relevante la supervivencia en un SNG? En cash sólo buscamos hacer el movimiento con mayor ev en fichas, mientras que en SNG existen los bubble factors, y las fichas varían de valor en función del reparto de stacks y la proximidad a los premios. Esto no implica necesariamente que debamos sobrevalorar la supervivencia, rechazando spots claramente positivos, por miedo a bustear el SNG. Con aquello de que las fichas que ganamos valen menos que las que perdemos, siempre estará justificado foldear de más en caso de duda, al menos de cara a sentirnos conformes con nuestro juego. Bien, este es el error más grave en el que podemos incurrir como regulares de SNG. Es cierto que las fichas perdidas tienen un valor mayor, y que los bubble factors existen y están ahí. Sin embargo, una vez entramos en una mano, a medida que el bote crece y el SPR se reduce, los bubble factors disminuyen, dado que nuestro stack pierde equity respecto al resto según se sucenden las apuestas y va disminuyendo,(las fichas del bote no nos pertenecen), y el movimiento con mayor ev en fichas suele ser el movimiento con mayor ev en $. Esto es especialmente cierto cuando la mano llega al turn y river, donde los SPRs generalmente son muy bajos, -salvo los dos primeros niveles-, y el juego es prácticamente igual que si se tratase de una partida de cash.
La conclusión que podemos sacar de todo ésto es que cuando nos implicamos en una mano, evitar jugar botes medios/grandes, si no tenemos un plan claro preflop y desde el flop es una consigna importante. El problema son las fases medias (25/12BBs), donde los botes medios-grandes son inevitables, puesto que cualquier mano que llegue al flop tras una secuencia estándar OR/call, implicará SPRs bajos. Es aquí donde la planificación de las manos adquiere una relevancia vital. Incluso antes de abrir la mano preflop, debemos estudiar el reparto de stacks que quedan por hablar tras nosotros, y decidir cómo actuaremos frente a cada uno de ellos.
Un ejemplo claro de ello puede ser cuando abrimos en BT manos del tipo AT+, con un stack en BB de 10bbs. Imaginemos que estamos en ciegas 50/100 y hacemos nuestro OR std en esta fase a 2,5BBs. BB paga y se crea un bote de 5,5BBs y nos sale pusheando de cara en un flop donde no hemos ligado sus 7,5BBs restantes. La decisión parece ciertamente complicada y seguramente acabaremos optando por el fold. Si en este mismo spot abrimos a 3,25BBs y BB paga se creará un bote de 7BBs y le quedarán por detrás otras 6,75, con lo que estaremos commited en todos los flops. Además de que le será mucho más incómodo pagar, y estaremos forzándole a tomar la decisión de comprometerse con el bote preflop, favoreciendo mucho a nuestra mano, que gana bastante de acabar AI en esta calle.
Así que ya sabéis, procurad llegar siempre a las últimas calles con un plan, y recordad que una vez estamos ahí, lo importante es la relación entre el stack efectivo y el bote, y no las BBs que nos queden por detrás.
Un saludo!
Me parece genial el artículo y muy acorde a las últimas discusiones de manos en el foro de Sit & Go Instituto de Educa, ¡un saludo CEJAKAS!
ResponderEliminar